Creo que una vez mas me toca discrepar de ud. Valeria, sepa bien que no se trata de nada personal. Pero... Ojala siempre tuviéramos conciencia de que la muerte no solo es la perdida de vida sino también es la perdida de las cosas que amamos, es caer en la rutina, es transformarse en el hombre o mujer alienado que vive por hacer girar aquel engranaje que moviliza aquella maquinaria, aquel que hasta los 60 años hizo lo mismo y que piensa que cuando jubile podrá hacer todo lo que quiere cuando al momento de poder hacerlo extrañará aquella tuerquita que movía el engranaje de tal o cual maquinaria.
ojalá que nunca
ResponderEliminarCreo que una vez mas me toca discrepar de ud. Valeria, sepa bien que no se trata de nada personal. Pero... Ojala siempre tuviéramos conciencia de que la muerte no solo es la perdida de vida sino también es la perdida de las cosas que amamos, es caer en la rutina, es transformarse en el hombre o mujer alienado que vive por hacer girar aquel engranaje que moviliza aquella maquinaria, aquel que hasta los 60 años hizo lo mismo y que piensa que cuando jubile podrá hacer todo lo que quiere cuando al momento de poder hacerlo extrañará aquella tuerquita que movía el engranaje de tal o cual maquinaria.
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